Un cantante de opera que cuenta con 1 millón de fans que no compran sus discos o que no asisten a sus conciertos es como tener un automóvil precioso pero sin llantas: no te llevará a ningún lado.
• El término fan define a aquellas personas que son simpatizantes o admiradores que sienten gusto y entusiasmo por algunas personas o marcas; son capaces de seguir de manera incondicional a otros a través de ideas, conceptos, sensaciones o estilos de vida conectados emocionalmente.
• Hablar de fans en estos años se ha convertido en un indicador social para algunas personas; puesto que estamos hiperconectados, y las redes sociales son la fuente de nuestras vidas, es más sencillo vincularse e identificarse con todo tipo de iniciativas en la red y ser parte de ellas.
• Muchas personas miden el éxito de sus empresas en base al número de fans o seguidores con los que cuentan en sus redes sociales, puesto que hoy en día se establecen métodos para valorar económicamente un determinado volumen de fans, y siempre será mejor construir fans verdaderos que comprar audiencias.
• En la actualidad el branding se enfrenta al reto de la transformación: convertir al seguidor en embajador. El primero es una buena estrategia de comunicación y alcances, pero el segundo ayuda a alcanzar metas de percepción, posicionamiento y rentabilidad.
SEGUIDORES VS. EMBAJADORES
• Los embajadores de marca son aquellos consumidores que son capaces de recomendarnos, de tener una continuidad con nosotros y que están dispuestos a defendernos como si ellos mismos fueran la marca. Para lograr esto se necesita compromiso con nuestras audiencias, ser proactivo en sus necesidades y trascender mas allá de la funcionalidad de nuestros productos y servicios.
• Será imperativo identificar a los usuarios más activos –que son los potenciales embajadores– y trabajar para fomentar su fidelidad. A través de las herramientas en línea –como métricas o la analítica web– se puede conocer qué usuarios han comentado recientemente, quiénes son habituales conversadores e incluso el alcance y repercusión de sus interacciones.
¿Y LOS CLIENTES EXISTENTES?
• No olvidemos tener un trato especial con los clientes ya existentes, aquellos que ya han comprado y conocen de cerca nuestros servicios. Aquí juega un papel muy relevante el uso de un CRM para mantener cada actividad del cliente a la vista de sus equipos de trabajo. También se pueden diseñar acciones específicas para los clientes, desde lanzar un mensaje claro e independiente para cada nicho, así como ofrecer productos y servicios exclusivos para ellos, lo que da como resultado beneficios que logran conectarse con su mercado.
• Tener seguidores es una tarea fuerte y permanente, pero construir embajadores será una decisión estratégica que impactará a toda la organización y abrazará una cultura interna por mejorar procesos y cumplir promesas.
• Los invito a enfrentar este gran reto y espero sus comentarios.
Fuente: El Horizonte